Sobre este eje central, se ha proyectado la entrada peatonal a la urbanización interior desde un acceso resuelto con escaleras y rampas adaptadas para salvar el desnivel que existe entre ambos edificios. También se accede a la parcela desde el vial inferior mediante el mismo sistema de rampas y escaleras y por él se da acceso a los garajes.

En planta baja, se sitúan las zonas dotacionales del conjunto residencial; una pista de padel en el bloque 1 y una piscina en el bloque 2, que serán de uso privado de los propietarios de las viviendas, a diferencia de los jardines que tienen uso público y abierto.

Las viviendas cuentan con una distribución racional que permite unas estancias bien dimensionadas, de proporciones acordes con la oferta de vivienda libre, pero a la vez contenidas en lo relativo al número de metros útiles, que en ningún caso otorga ratios forzados con el programa al que se ajustan.  Los espacios de distribución del interior de cada vivienda son contenidos, en la medida que permite la tipología de vivienda y su programa funcional concentrando la mayor superficie posible en las estancias.